queridos amigos buenos para esto que siúticamente se denomina running, cross country running y todos los
otros anglicismos que se utilizan para nombrar este deporte que consiste en
correr como condenado por donde a uno
más le guste (no siempre). Saludos a todos aquellos expertos, medianamente
expertos, inexpertos y principiantes, saludos a los “pellejo y huesos” a los
simplemente flacos, musculines y en especial a los gorditos que disfrutan de
este hermoso deporte que se corre con la cabeza y el corazón más que con las
piernas.
Iniciamos junto a todos los
deportistas y no deportistas (al final da lo mismo) este humilde espacio para
compartir vivencias, historias, cuentos, ideas, fantasías y sueños que tienen
que ver con la perseverancia y la fuerza de voluntad para lograr cumplir con
los objetivos propuestos en las carreras de largas distancias.
Les cuento que como muchos de ustedes
empecé en esto "del correr” para bajar la guata, para dejar de ser tan gordo (sigo
siendo rellenito) y por salud. Pero con el paso del tiempo y la práctica
prologada de este deporte me di cuenta de que esto del “running” era mucho más.
Debo aclarar que este espacio no se
crea para jactarse de los logros obtenidos ni creerse el cuento o engrupirse
con este deporte del cuál muchos opinan que es una moda y que responde a una
disciplina de masividad pasajera (amargados y pseudointelectuales). No, se
trata más bien de un lugar para hablar, compartir, discutir y para saciar mi
necesidad de darle aún mayor trascendencia a lo que hago y para compartirlo con
quien quiera leerlo. Ya verán que no soy un gran corredor, no cumplo con los
requisitos físicos (al menos estéticos) de un runner o un gran deportista, pero
da lo mismo, como dije antes, esto se corre con la cabeza y el corazón.
A pesar de lo anterior, vale la pena
comentar que llevo al menos 5 años en esto, de hecho mientras trataba de
acordarme cuando empecé, me acordé de mis primeros 9k, allá por el 2009, había
carretiado la tarde anterior en la facultad (mala idea) y sentí que me moría,
pero la alegría de cruzar la meta no la olvidaré jamás. De ahí en más siguieron
varios 10k, luego los 21k y las corridas en cerro, hasta que finalmente corrí
mis primeros 42k, sensación increíble ya que sin importar cuánto me demoré, la sensación de cruzar la meta, se los digo, es indescriptible.
En fin, que
les puedo decir, gracias al running he mejorado mi calidad de vida y mi salud, y
a pesar de que si bien en algún momento baje harto de peso y luego lo he
recuperado (lo que no me importa tanto, pues tengo una hermosa mujer que me
ama) les puedo decir que el running también me ayudó a fortalecer una amistad
con un gran tipo como el Pirata, me permitió conocer gente muy valiosa en el Team, me ayudó con las tensiones del día a día, y me ayudó a entender que basta
con que uno se lo proponga para lograr cualquier cosa.
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