Hace algunas semanas, como parte de la preparación para la maratón que se viene este domingo (no queda nada!!!), se realizó, por instrucción del profe y según lo ordenaba el programa, el control de los 30k. Este control siempre se hace antes de la maratón y es una muy buena prueba (durísima) para ver como estamos para los 42k. Esta vez la tarea consistió en recorrer la distancia entre La Herradura y Guanaqueros.
La cosa no fue nada de fácil, el trayecto entre estos dos balnearios no esta exento de subidas y bajadas, lo que hace un poco pesado el trote. Partimos bien tempranito, como de costumbre y como siempre, al principio todo bien y al final no tanto jajaja.
La experiencia es siempre más que satisfactoria, el paisaje en esta ocasión estaba muy bueno. Imagínate corriendo por la carretera, con el mar a un lado y las montañas al otro, simplemente genial. Además, participar junto a los compañeros del Team es siempre una grata experiencia.
Al final, si bien dolían las piernas, no importaba tanto pues vino lo mejor, su buen chapuzón en la playa de Guanaqueros y luego un rico y contundente almuerzo en el "El Pequeño", clásico restaurante del lugar. Nada mejor que culminar una mañana de deporte con un buen pescado frito, ensalada y una cerveza bien helada. Premio más que merecido.
La cosa es que ya no queda nada para la Maratón de Santiago, estamos a un día y algunas horas, ya no queda nada más por hacer, más que mentalizarse y visualizar el cruce de la meta. Esperemos que todo salga bien. A ponerle corazón y cabeza!!!
Como siempre, les dejo el respectivo registro audiovisual.
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